Cuenta la Leyenda que hace mucho tiempo existían unos gigantes de un solo ojo: Los cíclopes, hijos de Urano, Dios del Cielo y de Gea, Diosa de la Tierra….
Así comienza este cuento que habla sobre la Muralla Ciclópea de Ibros y sobre la maravillosa ciudad de Cástulo, cerca de Linares. La muralla ha persistido durante siglos y es uno de los símbolos más importante. Supuso un refugio para los habitantes de la vecina Cástulo cuando tuvieron que huir, dejando atrás toda su vida.
Una forma fácil y entretenida de que los pequeños de la casa conozcan la historia.
Está maravillosamente ilustrado por Rocío Sepúlveda Martínez.